El quebrantahuesos vuelve a reinar en la Tinenç.

Dos pollos de crebalòs (quebrantahuesos) serán liberados este miércoles en la Tinença de Benifassà como parte del programa para la reintroducción de esta especie amenazada que desapareció de la zona a finales del siglo XIX. Previamente, técnicos de la conselleria y la propia titular de Medio Ambiente, Elena Cebrián, han visitado el área de liberación buscando la complicidad de la población. Elena Cebrián sostiene que el proyecto persigue «reforzar el patrimonio cultural y natural, recuperar la memoria de una forma de vivir y de hacer compatible la naturaleza y la actividad humana». El proyecto se inició hace ahora dos años a partir de la constatación de que el quebrantahuesos, (Gyapaetus barbatus) había tenido una presencia histórica en la Tinença. Según explican técnicos de la conselleria de Medio Ambiente, «la idea de reintroducir el quebrantahuesos surgió al encontrar en escritos del siglo XVI que existía un ave en la Comunitat conocida como «crebalòs». El autor la traducía al latín como «ossifrago» (el que come huesos), de lo que dedujimos que se trataba del Gypaetus barbatus, del que había muy pocos datos antiguos , ya que siempre se habían buscado referencias a «quebrantahuesos» (castellano) o «trencalòs» (valencià)». «Una vez conocido el nombre por el que era conocido y buscando toponimia, encontramos rocas del crebalòs en el Maestrazgo y relatos antiguos de su presencia hasta finales del siglo XIX», añaden. Una vez asegurada su presencia, relativamente reciente, y elaborado un informe de viabilidad por la Universitat de Valencia, los técnicos de la conselleria se pusieron en contacto con el Ministerio de Medio Ambiente y los gobiernos autonómicos de Aragón y Cataluña, que ya trabajan en proyectos de recuperación de esta especie amenazada, con instalaciones para su cría en cautividad. Aceptada la propuesta a nivel estatal, se interesó en el proyecto la Vulture Conservation Fundation (VCF) que coordina la recuperación del quebrantahuesos en toda Europa. «Para ellos, que persiguen conectar las poblaciones que quedaron aisladas desde el Cáucaso hasta España, el proyecto valenciano resultó muy atractivo ya que no sólo podría constituir un nuevo eslabón en la cadena de montañas que vuelven a acoger a la especie, sino que además, la devolvería a la media montaña mediterránea donde se extinguió antes de quedar recluida en los altos picos de Pirineos y Alpes», explican en la Generalitat. Los expertos confían en que si consiguen una población estable en la Tinença se establezca a la larga un contacto entre las colonias existentes en los Pirineos, las del interior del Castelló y la que se está consolidando, gracias también a una reintroducción, en el parque natural de la Sierra de Cazorla y las Viudas. También se está desarrollando un programa similar al valenciano en el Parque Natural Sierra de Castril , en Granada. En ambos casos se trata de lograr que la especie pueda sacar adelante sus propias crías hasta crear colonias estables. La liberación de los dos polluelos está prevista para el miércoles a las 12 horas en Bel, en el término municipal de Rossell y dentro del Parque Natural de la Tinença de Benifassà) contará con la presencia de la consellera de Agricultura y Medio Ambiente, Elena Cebrián y de la vicepresidenta de la Generalitat Mónica Oltra. El quebrantahuesos es un ave de vuelo majestuoso que puede alcanzar hasta 290 centímetros de envergadura. Según SEO Birdlife, la especie se distribuye por las regiones montañosas de Eurasia y África, si bien sus poblaciones más importantes residen en África oriental y meridional, así como en Asia central y el Himalaya. El quebrantahuesos ha desaparecido de la mayoría de las regiones montañosas del centro y sur de Europa, donde su presencia actual se limita a los Pirineos, Creta, Córcega y algunos puntos de los Balcanes. En la ficha del quebrantahuesos elaborada por SEO Birdlife se destaca que es un ave «extraordinariamente especializada», que se constituye como el último eslabón en el aprovechamiento de las carroñas, ya que se nutre básicamente de huesos de grandes ungulados, que ingiere después de fracturarlos sobre las rocas en determinados lugares de su territorio, denominados rompederos. «No obstante, también puede aprovechar tendones, pellejos y otras partes de los cadáveres, así como pequeñas carroñas que detecta durante su incansable patrullar. Ocasionalmente, estas grandes rapaces pueden dar muerte a pequeños vertebrados o parasitar a otras aves, como águilas reales, alimoches, cuervos o buitres leonados, a las que obliga a entregarle el alimento que transportan», añaden las fuentes. Amenazas Respecto a las amenazas, SEO-Birdlife recuerda que quebrantahuesos «ha sido duramente perseguido a lo largo de décadas, acusado —de forma totalmente infundada— de atacar al ganado e incluso a las personas». El problema principal que está encontrando el programa para su reintroducción es el uso indiscriminado del veneno, que supone aproximadamente el 30% de las bajas, seguido por la caza ilegal y los choques con los tendidos eléctricos. También se percibe el impacto que están provocando algunos de los medicamentos y sustancias químicas utilizadas profusamente en el ganado y que acaban llegando al quebrantahuesos El quebrantahuesos figura en el Libro Rojo de las aves de España como «En peligro» y aparece en la categoría de «En peligro de extinción»en el Catálogo Nacional de Especies Amenazadas. Fuente: https://amp.levante-emv.com/comunitat-valenciana/2018/05/28/quebrantahuesos-vuelve-reinar-tinenca/1724007.html?__twitter_impression=true