Entre las aves, por la Sierra de Partara.

¿Cuánta energía fotovoltaica cabe en el sistema eléctrico ibérico?

El informe “Instalación de energías renovables en el Sistema Eléctrico Peninsular”, elaborado por Ecologistas en Acción, revela algunas grandes bondades, como descarbonizar la economía, y también no pocos efectos perjudiciales, sobre todo “por su despliegue masivo no planificado”. Gráficas, datos y análisis para evitar, si aún se está a tiempo, una nueva “burbuja”, sin olvidar el objetivo de “abastecernos completamente de fuentes renovables en 2030”.

Los precios cada vez más altos de la energía fósil, unidos al descenso de los precios de las renovables (especialmente la solar fotovoltaica) y algunas medidas tomadas para descarbonizar la economía en línea con los objetivos climáticos para ‘salvar’ a nuestro planeta, están haciendo que a nivel mundial el desarrollo de renovables se impulse cada vez más.

Del informe “Instalación de energías renovables en el Sistema Eléctrico Peninsular”, elaborado por Ecologistas en Acción, se desprende que Aragón y el Estado español no son un caso aislado y que, al mismo tiempo que se están generando efectos beneficiosos, con las energías renovables superando el 50% de la generación eléctrica, la forma en la que se está dando este despliegue está generando efectos perjudiciales.

“El despliegue de forma no planificada por parte de grandes empresas, en forma de instalaciones cada vez más grandes y en lo que viene a llamarse ‘la España vaciada’, ha originado un fuerte rechazo social a múltiples proyectos”, recuerdan desde Ecologistas en Acción.

La entidad defiende “la necesidad de alcanzar la neutralidad climática en 2040 en los países del norte global. Estos países, que han sido los principales causantes de la emergencia climática, y tienen al mismo tiempo los mayores recursos para resolverla, deben asumir la responsabilidad de minimizar esta crisis lo antes posible”. En línea con este objetivo, la organización considera que el sistema eléctrico del Estado español “debería abastecerse completamente de fuentes renovables en 2030”.

Sin embargo, la falta de planificación en el despliegue de las energías renovables en el Estado español, y en su colonia, Aragón, tratada como ‘tierra de sacrificio’, se materializa, entre otras cosas “en el sobredimensionamiento de proyectos, fundamentalmente fotovoltaicos, que han solicitado, y en muchas ocasiones obtenido, permisos de acceso a las redes”. Proyectos que representan una potencia instalada muy superior a la prevista en el PNIEC (Plan Estatal Integrado de Energía y Clima), en concreto un 27% más en eólica y entre un 56% y un 85% más de potencia fotovoltaica “en función de que se tengan en cuenta los proyectos con permiso de acceso concedido o los que lo tienen solicitado”, destacan desde Ecologistas en Acción.

Otro síntoma de esta falta de planificación es la instalación de grandes centrales de generación alejadas del consumo y muchas veces en zonas cada vez más saturadas de proyectos de este tipo (eólica y fotovoltaica, fundamentalmente).

“Lo que se suma a una creciente preocupación de los impactos que supondría convertirnos en un gran exportador de energía. Así, pasar de un saldo netamente importador en 2020 a un saldo exportador de casi 50 TWh de energía eléctrica, o las ingentes cantidades de hidrógeno para exportación anunciadas para 2030, conllevan un incremento sustancial en la ocupación del territorio, el incremento de impactos ambientales y sociales, además de costes de infraestructuras asumidos por toda la población”, enfatizan desde Ecologistas en Acción.

Algunos de los efectos perjudiciales de esta falta de planificación, coordinación y control son posibles impactos ecológicos, debidos fundamentalmente a los efectos sinérgicos de los proyectos próximos entre sí, así como efectos sociales, sobre el paisaje y sobre la economía de algunas poblaciones, debido a la saturación de proyectos en algunos municipios. A estos se les suman los efectos sobre el sistema eléctrico como son la saturación de algunos nudos, el desplome de precios en las horas de mayor generación, o la necesidad cada vez más habitual de parar o limitar la generación de energía renovable, debido a que la generación se sitúa por encima del consumo.

“En los últimos años la transformación del sistema eléctrico ha sido notable, se ha pasado de una producción en grandes centrales térmicas de carbón, gas y nuclear a un sistema eléctrico donde la penetración de renovables supera la mitad de la producción. Estamos en un momento transitorio, en el que se debería alcanzar antes del fin de la década un sistema 100% renovable”, destacan desde Ecologistas en Acción.

Esa transformación, a juicio de la entidad “supone retos adicionales desde el punto de vista de diseño del sistema eléctrico, entre ellos, que la disponibilidad del recurso eólico o fotovoltaico depende de que haya sol o viento haciendo que dimensionar estas potencias sea más importante que nunca para garantizar el suministro y evitar un sobredimensionamiento de las potencias instaladas que genere un exceso de recortes en la generación, los conocidos como vertidos o curtailments, según su denominación en inglés”. Por ello, este estudio “trata de estimar cuál sería la potencia máxima que se podría instalar de una forma razonable, en el sistema eléctrico peninsular, con el objetivo de lograr un sistema 100% renovable”.

Así, el estudio se ha centrado fundamentalmente en la energía fotovoltaica por ser la que mayores volúmenes de permisos de acceso tiene en solicitud en comparación con los objetivos del PNIEC “y también por ser la que presenta un perfil horario predecible y más proclive a que su sobredimensionamiento genere recortes de potencia”. A lo largo del estudio se muestra cómo superado un cierto límite “el incremento de la potencia instalada genera un incremento mayor de la energía no suministrada que de la energía generada, por lo que este punto representaría un límite a la instalación”. Este límite depende de múltiples factores “como las curvas de demanda, la capacidad de almacenamiento y de exportación, o de la potencia instalada de las distintas fuentes energéticas”, aseveran desde Ecologistas en Acción

Fuente:

https://arainfo.org/cuanta-energia-fotovoltaica-cabe-sistema-electrico-iberico/