Recuperando territorios perdidos: un programa de acciones para la identificación de nuevas áreas de asentamiento del quebrantahuesos.
Desde la Fundación para la Conservación del Quebrantahuesos (FCQ) consideran que “la situación actual puede ser claramente mejorada con la implantación de estrategias y acciones de conservación que han funcionado en las últimas décadas en la población pirenaica”.
Desde 1990, el quebrantahuesos ha pasado en pocas décadas de ser una especie en inminente riesgo de extinción a nivel estatal y comunitario a tener una situación esperanzadora tanto por la recuperación de la población pirenaica, como por la evolución de diferentes proyectos de reintroducción (Picos de Europa, Sierra de Cazorla, Alpes y Maestrazgo).
Paralelamente a estas iniciativas, se están produciendo asentamientos “naturales” favorecidos por los ejemplares dispersantes de la población fuente pirenaica y de los citados proyectos, tanto en poblaciones ya formadas (Pirineos, Picos de Europa y Sierra de Cazorla), como en sistemas montañosos con abundantes recursos tróficos disponibles para la especie (Sierras de Gredos, Guadarrama o Sistema Ibérico).
Desde la Fundación para la Conservación del Quebrantahuesos (FCQ) consideran que “la situación actual puede ser claramente mejorada con la implantación de estrategias y acciones de conservación que han funcionado en las últimas décadas en la población pirenaica”.
Este es el caso del proyecto ‘Recuperando territorios perdidos’ que ha sido promovido por la FCQ con el apoyo de la Fundación Biodiversidad, del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, contando con el amparo administrativo de los diferentes gobiernos territoriales implicados.
Ámbito territorial
La aplicación de dicho proyecto se realizaría en las Montañas del centro y el norte peninsular, entendiendo como tales el Sistema Central (Sierras de Gredos y Guadarrama), el Sistema Ibérico (desde el País Valencià al norte de Burgos), Cordillera Cantábrica, Montes Vascos y Pirineos. Los territorios implicados son: Asturies, Cantabria, Castilla y León, La Rioja, Euskal Herria, Nafarroa, Aragón, Castilla La Mancha, Extremadura, Madrid y País Valencià.
Método de trabajo
La presente iniciativa pretende monitorizar el citado proceso de recuperación de poblaciones que se extinguieron a lo largo del siglo XIX, así como crear las condiciones ambientales y sociales necesarias para su recuperación integral.
Las acciones contempladas para la consecución de estos fines son la recopilación de la información histórica previa a la desaparición del quebrantahuesos en los sistemas montañosos de nueva recolonización; recopilación de la información pormenorizada de las observaciones y asentamientos en la última década; trabajos de inventario y seguimiento en áreas potenciales de ocupación por la especie; actualización cartográfica de las denominadas áreas críticas, en nuevos territorios ocupados en los Pirineos; un proceso informativo con gestores y personal de campo de las administraciones autonómicas y estatales para informar de la evolución, nuevos datos y recomendaciones para la gestión de la especie en esta fase inicial; una campaña de comunicación vinculada a la recuperación del quebrantahuesos.
Fuente: https://arainfo.org/recuperando-territorios-perdidos-un-programa-de-acciones-para-la-identificacion-de-nuevas-areas-de-asentamiento-del-quebrantahuesos/
Principales resultados esperados
Los resultados y objetivos se concretan en la mejora del conocimiento poblacional del quebrantahuesos; la identificación de nuevas áreas de asentamiento de quebrantahuesos en las montañas del centro y norte peninsular; información e implicación a gestores y administraciones territoriales en la gestión del quebrantahuesos; y la sensibilización a amplios colectivos sociales en la conservación de la biodiversidad a través del quebrantahuesos.
Cabe recordar que la Fundación para la Conservación del Quebrantahuesos se dedica, desde 1995, a promover y desarrollar proyectos de conservación en los hábitats de montaña en los que vive esta rara especie. Su principal objetivo es promover actitudes de respeto por los valores ligados a la conservación de la biodiversidad y la sostenibilidad.
