La mortalidad de las aves por las líneas eléctricas y los parques eólicos: “Son auténticas trampas mortales”.
En Aragón, el 20% del entramado eléctrico no se ajusta todavía a las prescripciones de la normativa vigente para protección de la avifauna. SOS Tendidos Eléctricos reclama la urgente aprobación del decreto para reducir la mortalidad de fauna en líneas eléctricas y parques eólicos.
Entre 15.000 y 30.000 aves se electrocutan en los tendidos eléctricos españoles cada año. En Aragón, según los datos registrados en el Centro de Recuperación de Fauna Silvestre de L’Alfranca, en 2023 ingresaron por esta causa 552 ejemplares. Teniendo en cuenta que, tal y como apuntan los expertos, solo se localiza un 10% de las aves que mueren, y el aumento de parques eólicos instalados en Aragón, la cifra de avifauna fenecida por tendidos eléctricos y aerogeneradores en el territorio aragonés podría elevarse a los 5.000 ejemplares al año. En este sentido, la Fundación para la Conservación del Quebrantahuesos en Aragón solicitaba recientemente al Departamento de Medio Ambiente y Turismo del Gobierno de Aragón, competente en la materia, datos sobre la mortalidad de aves por colisión o electrocución en tendidos eléctricos entre 2023 y 2024, e instaba al ejecutivo requerir a las empresas eléctricas el cumplimiento de las medidas de prevención, evitación y reparación contempladas en la Ley 26/2007 de Responsabilidad Medio Ambiental. Este diario ha solicitado al Departamento de Medio Ambiente los datos relativos a 2024 y, por el momento, no los ha podido obtener. Por su parte, desde la Plataforma SOS Tendidos Eléctricos, esta semana han pedido al Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico (MITECO) la aprobación urgente de medidas “más ambiciosas” para acabar con lo que considera “auténticas trampas mortales”, en referencia a los tendidos eléctricos y aerogeneradores que se encuentran repartidos por toda la geografía. Entre esas medidas se encuentra extender la obligación de aplicar las medidas de corrección en los tendidos eléctricos peligrosos más allá de las Zonas de Protección, la construcción de tendidos eléctricos con criterios de diseño seguro para las aves, la aplicación del principio de prevención en la implantación de aerogeneradores en zonas de alta sensibilidad ambiental así como la mejora de los sistemas de detección y parada de las máquinas, y la creación de un comité técnico de seguimiento y la elaboración de informes periódicos por parte del MITECO.
Situación en Aragón: más del 20% del entramado eléctrico fuera de la normativa
El águila perdicera, el milano real, la avutarda y el quebrantahuesos, son algunas de las especies más amenazadas de la fauna aragonesa que se ven expuestas a otra amenaza exterior, las líneas eléctricas (electrocución y colisión) y los aerogeneradores (colisión y barotrauma). Las entidades relacionadas con la conservación de la naturaleza y de las aves recuerdan que estas muertes “no son accidentales, sino sucesos previsibles y esperables que ocurren cuando la instalación es peligrosa” para la avifauna y no dispone de las apropiadas soluciones técnicas que garanticen su total inocuidad. En Aragón, los primeros trabajos de corrección de tendidos eléctricos se iniciaron en el año 2002, desde entonces se han corregido cerca de 2.500 apoyos, se han señalizado unos 320 km de cables aéreos, además de alguna intervención de soterramiento en líneas especialmente peligrosas. Unos trabajos que se han llevado a cabo con el apoyo del instrumento financiero LIFE de la Unión Europea, tal y como explican fuentes del ejecutivo. El inventario de líneas que no se ajustan a las especificaciones técnicas establecidas por el Real Decreto vigente, un total de 2.144 líneas eléctricas de alta tensión, que en su conjunto supone cerca de 6.570 km de recorrido (en torno al 20% del entramado eléctrico aragonés) no se ajusta todavía a las prescripciones de la normativa vigente para protección de la avifauna. De tenerse en cuenta la petición de la Plataforma SOS Tendidos Eléctricos para ampliar las medidas de corrección de los tendidos eléctricos a toda la red y no solo a las Zonas de Protección, la red eléctrica en Aragón superaría los 30.000 km de longitud.
Aplicación desigual en las tres provincias aragonesas
La comunidad cuenta con algunas normas electrotécnicas básicas para mitigar el riesgo de electrocución para las aves, que se están aplicando en las Zonas de Protección de la Avifauna (ZP) declaradas por el Gobierno de Aragón, tanto en las de nueva construcción como en las ya existentes y que contemplan cambios estructurales en el diseño de los armados, el establecimiento de unas distancias mínimas accesibles de seguridad entre zonas de posada y elementos en tensión, y el aislamiento de aquellos elementos en tensión que no puedan instalarse manteniendo la distancia requerida. Sin embargo, la Fundación para la Conservación del Quebrantahuesos (FCQ) denuncia que la aplicación de estos requerimientos, así como la tramitación de los expedientes no se produce de la misma manera, ni con la misma intensidad, en las tres provincias aragonesas. E insisten en que el Gobierno de Aragón “debe requerir por Ley a las empresas eléctricas la corrección de líneas eléctricas e incoar expedientes sancionadores en aquellos tendidos eléctricos donde se producen muertes por electrocución y colisión”.
Ampliar las medidas de corrección más allá de las Zonas de Protección
Integrada por algunas de las principales entidades relacionadas con la conservación de la naturaleza y de las aves, la Plataforma SOS Tendidos Eléctricos reconoce el avance que supone el borrador del nuevo real decreto que regulará la corrección de tendidos eléctricos para la protección de la avifauna, así como la reducción de la mortalidad de fauna por colisión con aerogeneradores. Sin embargo, las entidades consideran que esta nueva normativa prometida por el MITECO debe incluir todavía algunas mejoras para paliar “una de las mayores amenazas para la biodiversidad del país”, que no debe haber más retrasos en su aprobación y denuncian, además, que “empresas que se dicen verdes y responsables” ponen pegas a la hora de dicha aprobación. En las alegaciones que han presentado durante el periodo de información pública del nuevo real decreto, que se cerró el pasado 12 de abril, las entidades pertenecientes a la Plataforma SOS Tendidos Eléctricos, ven imprescindible extender la obligación de aplicar las medidas de corrección en los tendidos eléctricos peligrosos para las aves a todo el territorio nacional. Actualmente, esta obligación se centra en las llamadas Zonas de Protección, una figura legal prevista en el real decreto de 2008 que se mantiene en el borrador que ha salido a información pública y que incluye a las Zonas de Especial Protección para las Aves (ZEPA) de la Red Natura 2000, a los ámbitos de aplicación de los planes de recuperación de las aves amenazadas y, en general, a las áreas prioritarias para estas especies catalogadas. La nueva norma prevé actuar también en los tendidos eléctricos situados fuera de las Zonas de Protección, pero siempre y cuando haya casos previos de electrocución o colisión de aves constatados por un agente de la autoridad. Una medida que las entidades para la protección de la avifauna consideran que es “totalmente insuficiente”. En cuanto a la aprobación del real decreto, SOS Tendidos Eléctricos reclama al Gobierno que se apruebe sin más demora, incluyendo en el texto definitivo los cambios propuestos en las alegaciones presentadas por sus entidades miembros.
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