Entre las aves, por la Sierra de Partara.

El quebrantahuesos consolida su recuperación en los Picos de Europa.

Actualmente hay alrededor de 50 ejemplares, lo que supone un “éxito” en la reintroducción de una especie que se extinguió en la Cordillera Cantábrica en 1956.

La población de quebrantahuesos continúa su recuperación en Picos de Europa, donde ya hay alrededor de 50 ejemplares, lo que supone un “éxito” en la reintroducción de una especie que se extinguió en la Cordillera Cantábrica en 1956.

El vicepresidente de la Fundación para la Conservación del Quebrantahuesos (FCG), Gerardo Báguena, ha recalcado la importancia de la existencia de parejas reproductoras estables para conseguir que la población sea autosostenible en un futuro.

Lograr diez parejas

El objetivo de la entidad es conseguir que haya, al menos, diez parejas que “consigan sacar adelante sus pollos y aportar cada año genética nueva a la población silvestre”.

“Ese sería un dato óptimo que nos permitiría hablar de una recuperación no consolidada, pero sí muy robusta. Aún nos queda un pequeño camino hasta alcanzar ese número”, ha manifestado Báguena.

Un episodio de depredación

El Principado cuenta, en estos momentos, con cuatro parejas “estables” que “defienden un territorio y que, o bien están criando ya o lo van a hacer en breve”, dependiendo de la madurez de los ejemplares.

“Tenemos mucha confianza en que este año sea importante en cuanto a volumen demográfico de parejas estables en Asturias”, ha incidido tras señalar que la comunidad registró un nacimiento en 2025, si bien el animal murió a los pocos días, posiblemente, en un episodio de depredación.

Seguimiento veterinario

El vicepresidente de la FCQ ha explicado que recuperar una especie extinguida es un “proceso muy complejo, muy lento y muy delicado”, dado que afectan numerosos aspectos, no solo el biológico, sino también cuestiones sociales o clínicas, como la detección de enfermedades.

La entidad realiza un seguimiento veterinario “muy riguroso” sobre la población de quebrantahuesos, lo que permite monitorizar su estado de salud desde su suelta en Picos de Europa.

Ejemplares liberados

En 2010 se inició el programa de recuperación de la especie en el Parque Nacional de Picos de Europa, que cuenta con unos 50 ejemplares, algunos reintroducidos por la fundación y otros que han llegado a estas montañas procedentes de Pirineos o de Andalucía y que “han encontrado en la Cordillera Cantábrica una hábitat adecuado”.

“Hemos pasado de cero a 50, lo cual desde el punto de vista demográfico ya es un éxito”, ha celebrado Báguena, quien ha resaltado que proyectos de este tipo, además de contribuir a recuperar una especie extinguida en esta parte de España, es una “oportunidad magnífica para recabar información”.

Báguena ha asegurado que la puesta en marcha de esta iniciativa les ha permitido “aprender” de la especie. “Cuantos más animales marcados, más seguimientos y más análisis, más eficaces somos en el trabajo”.

Fuente:

https://www.eldiario.es/asturias/quebrantahuesos-consolida-recuperacion-picos-europa_1_12534591.html