La ganadería tradicional asegura su rentabilidad en los Picos de Europa y contribuye a la conservación del quebrantahuesos.
A través del proyecto ProBiodiversidad, la Fundación Quebrantahuesos y Alimerka fomentan el uso de los métodos tradicionales en la actividad ganadera y la economía circular en el sector.
Los ganaderos de los Picos de Europa tienen asegurada la rentabilidad de su actividad y su sosteniblidad a largo plazo a través de su participación en el proyecto ProBiodiversidad, en el que colaboran la Fundación Quebrantahuesos y Alimerka. Su objetivo es salvaguardar los métodos tradicionales en la actividad ganadera. Así, la cadena asturiana de supermercados garantiza la compra total de la producción anual de la carne de lechazos criados en plena naturaleza en los Picos de Europa, con lo que se obtiene un producto cien por cien natural, ya que se trata de animales que solo consumen lo que obtienen de la naturaleza -leche materna y pastos- en plena libertad, sin piensos ni aditivos. Además de la producción de carne de alta calidad, este proyecto contribuye también al resurgimiento del quebrantahuesos, una especie extinta en los Picos de Europa en los años cincuenta del pasado siglo y cuya recuperación se inició en el año 2010 con la suelta de los primeros ejemplares. La sostenibilidad de este programa incluye el aprovechamiento de todos los residuos no aptos para uso humano, que son reorientados, a través de unos protocolos específicos aprobados por las autoridades, para alimentar a las aves necrófagas del territorio, entre las que se encuentra el quebrantahuesos. De esta manera, el proyecto ProBiodiversidad también impulsa la economía circular en la actividad ganadera extensiva de los Picos.
