La caza de martas y garduñas para proteger al urogallo enfada a los ecologistas de Aragón.
Las entidades ambientalista de Aragón reclaman al departamento de Medio Ambiente estudios científicos que validen el efecto positivo de la eliminación de depredadores sobre la supervivencia del ave protegida
El plan puesto en marcha por el Gobierno de Aragón para cazar martas y garduñas con el objetivo de proteger al urogallo ha enfadado a los colectivos ecologistas de la comunidad. Por este motivo las entidades ambientalista han reclamado al departamento de Medio Ambiente estudios científicos que validen el efecto positivo de la eliminación de depredadores sobre la supervivencia del ave protegida
En una nota conjunta lanzada por Ecologistas en Acción Aragón, Amigos de la Tierra Aragón y Ansar, indican que conforme a la información realizada por el propio departamento de Medio Ambiente del Gobierno de Aragón, durante este año 2024 se han realizado medidas de control de depredadores del urogallo, actuando sobre especies incluidas en el listado aragonés de especies con régimen de protección especial como la garduña y la marta, así como otras especies no protegidas como el zorro, gatos y perros cimarrones. «Estas actuaciones se realizan mediante un contrato, no sabemos a quién se le ha adjudicado, ni cuánto durará, con qué presupuesto público se cuenta, ni sobre qué superficie se piensa actuar o cómo se han seleccionado las zonas de traslocación de martas y garduñas y su seguimiento posterior, ya que estos aspectos no han sido explicados por el departamento», lamentan.
También detallan que estas actuaciones realizadas por la administración aragonesa «no son innovadoras» y ya se han obtenido resultados de trabajos similares realizados en Castilla y León en el marco de Life Urogallo y publicado por el MITECO y, donde se evidenció «la más que dudosa necesidad de esta iniciativa», sin encontrar estudios científicos que validasen el efecto positivo de la eliminación de depredadores sobre la supervivencia del urogallo.
Por su parte, el diputado de IU, Álvaro Sanz, ya registró a finales de septiembre una pregunta en las Cortes de Aragón reclamando conocer la tutela y control de estos trabajos. Desde el Ejecutivo autonómico respondieron que el control de la ejecución se realiza mediante los Agentes de Protección de la Naturaleza y además por el personal funcionario que analizará el resultado de los informes que se debe presentar sobre los trabajos que se realicen.
La población de urogallos en Aragón se ha reducido un 74% desde 1990
Las entidades afirman que atrás debieron quedar las ideas de eliminación de las “alimañas”, más cuando infinidad de estudios sobre relaciones de predador-presa definen unas relaciones muy frágiles y complejas. «El departamento de Medio Ambiente y sus técnicos deberían tratar el problema del urogallo con la humildad y no seguir utilizando recetas que se han demostrado rotundamente ineficaces, costosas económicamente y éticamente muy cuestionables», aseguran. Además cargan contra el Gobierno de Aragón por favorecer interferencias humanas como sucede con la pista que está abriendo en la cara norte de Maristás en el término de Tella-Sin en un área crítica de urogallo. «Las pistas incrementan la frecuentación humana y con ella las molestias y presencia de depredadores oportunistas como zorros y córvidos tras el rastro y los residuos de los visitantes», dicen.
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