El Tribunal de Cuentas Europeo demuestra que la PAC no ha frenado el declive de la biodiversidad.
En Europa, desde hace muchos años, el número y la variedad de especies animales en las tierras agrícolas se han reducido. Desde 1990 las poblaciones de aves agrarias y mariposas se han reducido en más de un 30%.
En 2011, la Comisión adoptó una estrategia sobre la biodiversidad para detener la pérdida de biodiversidad y la degradación de los ecosistemas antes del final de 2020. Se comprometió a aumentar la contribución de la agricultura y la silvicultura a mantener y mejorar la biodiversidad en el contexto de un compromiso internacional, a partir de la ratificación del Convenio sobre la Diversidad Biológica de las Naciones Unidas por todos los Estados miembros y la propia Unión Europea.
Para el período 2014-2020, la Comisión planificó utilizar el 8,1% del presupuesto de la UE (86.000 millones de euros) en la biodiversidad, con un 77% de dicho importe (66.000 millones de euros) procedente de la PAC (Grenning y agroambientales).
El papel de la UE en la protección y la mejora de la biodiversidad en las tierras agrícolas es crucial porque la UE establece normas medioambientales a través de la legislación y cofinancia la mayor parte del gasto agrícola de los Estados miembros.
La auditoría del Tribunal de Cuentas Europeo tuvo por objeto evaluar la contribución de la PAC al mantenimiento y la mejora de la biodiversidad. Hemos examinado los esfuerzos de la UE para lograr sus objetivos en materia de biodiversidad para 2020 y formulamos recomendaciones para contribuir a los actuales preparativos legislativos para la PAC 2021-2027 y la aplicación de la nueva Estrategia de la UE sobre la biodiversidad posterior a 2020.
Se ha constatado que la formulación del objetivo relativo a la agricultura y las acciones en el marco de la Estrategia de la UE sobre la biodiversidad hasta 2020 dificultan la medición del progreso. Tambiénse ha observado una falta de coordinación entre las políticas y las estrategias de la UE. Por último se observa que el seguimiento dado por la Comisión a los gastos de la PAC en favor de la biodiversidad no es fiable.
El efecto de los pagos directos de la PAC (el 70 % del gasto agrícola de la UE) en la biodiversidad agrícola es limitado. Algunos requisitos de los pagos directos, en particular la ecologización y la condicionalidad, tienen potencial para mejorar la biodiversidad, pero la Comisión y los Estados miembros han favorecido opciones de escaso impacto. Los instrumentos de desarrollo rural de la UE tienen mayor potencial que los pagos directos para mantener y mejorar la biodiversidad. Sin embargo, los Estados miembros utilizan relativamente poco las medidas de desarrollo rural de gran repercusión, como los programas basados en los resultados y los programas.
Recomendamos que la Comisión: 1) mejore la coordinación y la concepción de la Estrategia de la UE sobre la biodiversidad posterior a 2020 y, también con este fin, haga un seguimiento más preciso de los gastos; 2) refuerce la contribución de los pagos directos a la biodiversidad agrícola; 3) aumente la contribución del desarrollo rural a la biodiversidad agrícola; 4) desarrolle indicadores fiables para evaluar el impacto de la PAC en la biodiversidad agrícola.
https://www.eca.europa.eu/Lists/ECADocuments/SR20_13/SR_Biodiversity_on_farmland_ES.pdf