Proyecto de investigación sobre la presencia del diclofenaco y de otros fármacos antiinflamatorios en las aves carroñeras de la Península Ibérica.

Las aves carroñeras, y en especial algunas especies de buitres, son extremadamente sensibles a los efectos tóxicos de fármacos antiinflamatorios no esteroideos, como el diclofenaco, que pueden ingerir accidentalmente a partir de los cadáveres del ganado doméstico tratado con estos productos. En los años 90, el diclofenaco causó una mortalidad catastrófica en las poblaciones de buitres del subcontinente indio debido al consumo de los cadáveres del ganado tratado con este medicamento. Se ha calculado que con tan solo un 0.8% de las canales de ganado con residuos de diclofenaco ya se podría haber causado esta mortalidad masiva, estimada en más de 40 millones de buitres muertos, lo que representa alrededor del 99% de la población, amenazando de extinción a varias especies. En 2013, la comunidad conservacionista y científica quedó consternada al producirse la concesión de licencia del diclofenaco para uso veterinario en algunos países europeos, entre ellos España. Esta situación supone un gravísimo riesgo para la conservación de las aves carroñeras, especialmente para la Península Ibérica, donde habitan el 95% de la población de buitres de Europa. La fundación estadounidense “Morris Animal Foundation” es una organización sin ánimo de lucro que invierte en investigación para promover la salud animal, incluida la fauna salvaje. Recientemente, esta fundación ha concedido un proyecto de investigación a un equipo de diversas instituciones españolas (Universidad Autónoma de Barcelona, Instituto de Investigación en Recursos Cinegéticos, Universidad de Lleida) y portuguesas (Universidad de Aveiro), así como el “Raptor Center” de la Universidad de Minnesota, para estudiar la exposición de las aves carroñeras al diclofenaco y a otros fármacos antiinflamatorios en la Península Ibérica. Este estudio tiene como objetivos investigar la presencia de residuos y de toxicidad de estos fármacos en las aves carroñeras ibéricas y detectar la posible presencia de estos fármacos en las canales de animales domésticos que se utilizan para su alimentación en puntos de alimentación controlados. Además, se realizará un análisis de riesgos mediante encuestas a veterinarios y personal responsable de los puntos de alimentación de aves carroñeras, para evaluar el uso que se está haciendo de estos fármacos y el impacto que puede tener en las poblaciones ibéricas. Los resultados que se obtengan servirán para informar a las autoridades veterinarias españolas para regular el uso de estos fármacos y eventualmente conducir a su prohibición, tal y como han hecho ya diversos países asiáticos desde 2006. Además, se alentará el uso de otros fármacos alternativos disponibles que se sabe que son seguros para los buitres y aves carroñeras en general. Contacto: Ignasi Marco. Servicio de Ecopatología de Fauna Salvaje (SEFaS), Departament de Medicina i Cirurgia Animals, Universitat Autònoma de Barcelona Rafael Mateo, Instituto de Investigación en Recursos Cinegéticos (IREC), Universidad de Castilla-La Mancha, Consejo Superior de Investigaciones Científicas. Fuente: http://www.irec.es/